El 2023 había comenzado con un buen crecimiento de la actividad económica nacional y santafecina. Pero en el 2° trimestre, el efecto de la sequía se hizo sentir lo que hizo que el 1° semestre presente datos de crecimiento de la actividad negativos. Con la aceleración inflacionaria y el cambio de gobierno va a ser difícil revertir esto.
El nivel de actividad a nivel nacional había comenzado promisoriamente el 2023 con una tasa de crecimiento interanual de 2,7% en enero, se mantuvo constante en febrero y en marzo volvió a crecer el 1,3%. En el 2° trimestre, la actividad económica se pinchó. En el promedio mensual de abril a junio la tasa de caída fue del -4,8% (con variación entre -4,4% y -5,5%). El factor determinante fue la caída del campo que cayó un 41% en el segundo trimestre.
En todo el 1° semestre del 2023 la economía nacional queda con una caída del 2% interanual.
De todas formas, para darle perspectiva a esta caída lo mejor es mirar una serie más larga. Esto se presenta en el gráfico a continuación sobre cómo se comportó la actividad económica en la última década.
Actividad económica nacional
2012 = 100
Fuente: LP CONSULTING en base a Ministerio de Economía
Desde el 2012 que la economía argentina no crece. El 2012 es el año del fin del boom de China que comenzó en el 2004 y en Argentina es el comienzo del cepo cambiario. Entre el 2012 y el 2018 la actividad económica nacional hizo un “serrucho” de un año de crecimiento y otro de caída. A partir del 2019 se terminó el “serrucho” porque a la caída de la crisis cambiaria se le sumó la fuerte caída por la pandemia.
En el 2021 comienza la recuperación, en el 2022 la actividad se recupera al nivel del 2017, o sea, se daba “técnicamente” por terminada la crisis cambiaria y del covid, y se esperaba –fundamentalmente el gobierno y sus economistas afines– que el 2023 sea un año de mayor crecimiento en la última década. Hubiese venido como anillo al dedo justo en año electoral.
Por esto era importante poner en contexto el comienzo de esta nota cuando decíamos que el 2023 había comenzado bien, con tasas de crecimiento de la actividad positivas, porque daba para ilusionarse. Pero a partir de abril comenzó a operar los efectos de la sequía y la actividad parece que volvió –en el mejor de los casos– al “serrucho”.
En el mejor de los casos porque, dado que el año que viene será de nueva gestión (aun cuando gane Massa; se entiende que ya será su presidencia, no la de Alberto Fernández), las medidas correctivas de inflación reprimida que se van a tener que tomar en el contexto de aceleración inflacionaria, ya hace presagiar que el 2024 va a ser de nueva caída en la actividad.
¿Y por Santa Fe cómo andamos?
En Santa Fe se tiene datos hasta mayo 2023, pero tomando como una proxi del 1° semestre al período enero – mayo, surge que la caída es mayor que a nivel nacional. Fue del 3% interanual, mientras que a nivel nacional fue del 2%.
Pero en la perspectiva de toda la década, el desenvolvimiento de Santa Fe fue mejor que la nacional.
Actividad económica de Santa Fe
2012 = 100
Fuente: LP CONSULTING en base a Ministerio de Economía
Por ejemplo, mientras la economía nacional entre el 2012 y el 2017 hacía un “serrucho” estacionario, la economía de Santa Fe hacía un “serrucho” también, pero creciente. Después con la crisis cambiaria más la pandemia entre 2018 y 2020, la caída también fue profunda. Tanto que se perdió todo el crecimiento obtenido en la primera mitad de la década y se volvió a un nivel equivalente al 2012.
La recuperación pos-pandemia tuvo fuerza similar a la nacional ya que Santa Fe recupera su nivel 2017, que es más alto que el nacional, pero luego la seca le pegó, aunque no cayó tanto, porque estaría hoy en un nivel como en el 2015 (no 2012 como la actividad nacional).
De todas formas, como se dijo anteriormente, se vienen tiempo difíciles de economía que se está contrayendo con perspectivas negativas dada la aceleración inflacionaria y el cambio de gestión de autoridades nacionales. No hay mucho espacio para el optimismo. Pero habrá que ir mirando cómo sigue la actividad.