Los datos laborales de Rosario son promisorios. Bajó fuerte la tasa de desempleo y aumentó la formalidad laboral. Pero la pobreza no solo que sigue siendo alta sino que también sigue creciendo. El motivo? La inflación.
Allí se observa que en el 1º semestre del 2022, si bien la inflación fue creciente, estaba recién levantando vuelo. Enero comenzó con 51% y en junio había subido a 64% interanual. En agosto ya está en 79% y el propio proyecto de Presupuesto del Gobierno nacional proyecta que la inflación en diciembre será del 95%. Definitivamente la tasa de 37% de pobreza va a ser hasta deseada cuando salgan los números del 2º trimestre.
De todas formas, es interesante ver alguna evolución y algunos lugares relevantes.
Tasa de pobres como % de la población
1º semestre de cada año
Fuente: LP CONSULTING en base a INDEC
Tomando como punto de partida el 1º semestre del 2018, que fue cuando comienza la crisis cambiaria, y que luego ensambla con la crisis del Covid, la pobreza urbana aumentó en el total país 10 puntos porcentuales, y aumentó en todos lados. Tomando 3 de los principales centros urbanos se observa que en CABA y Rosario aumentó 5 y 6 puntos, respectivamente, mientras que en el Conurbano aumentó 10 puntos.
De hecho, lo que eleva el promedio de la pobreza es precisamente lo elevada que es en el Conurbano (42% contra 37% del promedio). En los otros grandes aglomerados urbanos, como CABA y Rosario, la pobreza es inferior y, aun cuando aumente, se mantiene por debajo del promedio.
Una pregunta que muchos se hacen es: ¿Por qué si los últimos datos del INDEC dieron baja del desempleo la pobreza no sólo que se mantiene alta sino que hasta aumenta?
De hecho, la tasa de desempleo entre los 2° trimestres del 2021 y el 2022 pasó de 9% a 5% en CABA, de 11% a 9% en Conurbano y de 12% a 4% en Rosario. Es más, en Rosario es incluso donde más bajo la tasa de desempleo.
La respuesta es, primero, que hay alta y creciente inflación. La inflación socava la capacidad adquisitiva de los hogares. Cuando los hogares tienen ingresos por montos cercanos a la Canasta Básica Total (línea de pobreza) un golpe de inflación los deja estadísticamente debajo de dicha línea, o sea, en la pobreza.
La contra-pregunta sería: “Ok, pero los sindicatos se preocupan de que los salarios sigan a la inflación”.
La respuesta es que la pobreza está altamente asociada a la falta de formalidad laboral. Para verlo más ilustrativamente se presenta el gráfico a continuación.
Allí se presenta el porcentaje de asalariados privados registrados y empleados públicos, que vendrían a ser el segmento clásico que se entiende como la formalidad laboral.
Por defecto, los que no están en este gráfico son los asalariados no registrados y los cuentapropistas. O sea, los ocupados que están en la informalidad laboral.
Si bien la mitad de los cuentapropistas están “formalizados” con el Monotributo, esta formalización es una habilitación legal no un aumento de la productividad laboral. En este sentido, cabe aclarar que formalidad laboral no es solamente registro legal sino también, y fundamentalmente, productividad económica que es lo que permite generar buenas remuneraciones y razonables condiciones de trabajo.
Tasa de empleo formal como % del empleo total
1º semestre de cada año
Fuente: LP CONSULTING en base a INDEC
Lo primero a destacar es la tendencia general. A mayor formalidad laboral menos tasa de pobreza. CABA tiene una tasa de formalidad cercana al 60% de los ocupados y su tasa de pobreza está por debajo del 20%. Rosario, tiene una tasa de formalidad de la mitad de los ocupados y su tasa de pobreza es de un tercio de la población. El Conurbano tiene menos de la mitad de los ocupados en la formalidad laboral y más de la mitad de su población en la pobreza.
Claramente hay una asociación entre formalidad laboral y pobreza y tiene que ver con la productividad económica. Como la formalidad laboral es mayor productividad, entonces, entonces hay más hogares con ingresos por encima de la Canasta Básica Total.
Lo segundo son las dinámicas. En los lugares donde aumentó la formalidad laboral (CABA y Rosario), la pobreza aumentó, pero, menos que el promedio. En el Conurbano donde la formalidad laboral cayó es donde la pobreza más aumentó. Esto es porque los informales, por no tener alta productividad, tienen bajos ingresos. Ergo: más informales, más pobreza.
El tercer aspecto a considerar vuelve sobre el tema inflación y pobreza. En CABA y, fundamentalmente, en Rosario, la formalidad laboral aumentó de manera sensible a pesar de la crisis económica. Sin embargo, la pobreza igual aumentó. Aquí metió la cola la inflación. O sea, inflación mató los beneficios de la formalidad laboral. Porque hizo crecer la pobreza incluso con expansión de la formalidad laboral.
La enseñanza: ¿Usted quiere desarrollo social?
Bien, tiene miles de políticas económicas, rurales, agroindustriales, industriales no tradicionales, tecnológicas, educativas, inmobiliarias, de servicios de cadena internacionales de valor, etc, etc. Pero primero tiene que erradicar la inflación.
Porque la inflación mata los ingresos de la gente que usted quiere hacer prosperar con las políticas de desarrollo.